Ferrero acude a la ciencia para reinventarse a los 30

Juan Carlos Ferrero brilla con 30 años, mientras otros colegas de su quinta, como Marat Safin, han colgado la raqueta. El de Villena, ex número uno, llegó a caer hasta el puesto 115º del ránking en mayo de 2009. Ayer, apareció el 16º tras encadenar los títulos de Costa do Sauipe (Brasil) y Buenos Aires.

Ferrero vagaba el año pasado derrotado por las lesiones y, a través de su fisioterapeuta, Víctor Moreno, llegó a las manos de Eduardo Cervelló, decano de la Facultad de Ciencias Sociosanitarias de la Universidad Miguel Hernández de Elche. "Nuestro secreto es aplicar la ciencia al entrenamiento. Otros en su lugar se habrían retirado, pero él es un espartano", valora Cervelló. La coordinación de sus técnicos, Antonio Martínez Cascales y Samuel López, con los expertos de la UMH José Luis Molina (preparación física), Víctor Moreno (prevención de lesiones) o Enrique Roche (nutrición) ha dado sus frutos.

Lesiones: Frenadas con chaleco lastrado para prevenir

"El tenis es muy asimétrico y Ferrero tenía problemas con las cargas en las frenadas. Empleó muchas horas en trabajos globalizados de fuerza y tolerancia a la frenada, que es lo que provoca lesiones. Hizo ejercicios de velocidad en los que sometió al músculo a exigencias progresivas, finalizando con chalecos lastrados para mejorar la tolerancia muscular".

Regeneración: hasta una hora de físico después de jugar

"Él, en su ordenador, lleva un cuestionario. En función de la fatiga percibida modula la carga física. Para ello, se aplica un modelo psicobiológico en el que influyen la duración de partido, la frecuencia cardíaca, las horas de sueño... Se aplica un cálculo y de ahí resulta lo que debe hacer tras jugar. Si ha disputado cinco sets, le toca un trabajo regenerativo. Si el partido es corto, puede hacer hasta una hora de físico".

Peso: Tres kilos menos pero sin perder velocidad

"Ha perdido tres kilos. Con ello, ha ganado en porcentaje de músculo y ha bajado su porcentaje de grasa a niveles cercanos al 9%. Así, mejora su consumo de oxígeno relativo y castiga menos las articulaciones sin perder velocidad".

Relajación entre punto y punto para descomprimir

"Aunque es muy duro mentalmente, dispone de recursos para momentos de máxima tensión. A través de técnicas de respiración y autoinstrucciones de ánimo. Pautas para relajarse en 20 o 30 segundos, tras un punto intenso. El trabajo respiratorio le ayuda a relajar el nivel muscular de los hombros. También le baja las pulsaciones y le ayuda a sacar mejor".

Alimentación: papillas para recuperar seis horas antes

"Antes, durante y después de jugar tiene pautadas las cargas de hidratos, con leche o agua. El secreto es cuándo administrarlos, por eso debe tener controlado el partido anterior al suyo. Son proteínas, hidratos y vitaminas que se pueden comprar en cualquier supermercado. Esto también lo hace Rafa Benítez en el Liverpool, y el Valencia. Están de moda en los equipos de fútbol. Está demostrado que, tras el esfuerzo, el cuerpo es más receptivo y se puede acelerar la recuperación entre cinco o seis horas".