La tenista bielorrusa Victoria Azarenka se ha mostrado muy emocionada tras conseguir el primer ''Grand Slam'' de su carrera deportiva, el Abierto de Australia, que le dará el número uno del tenis mundial a partir del lunes, y ha asegurado que no podía creer que el torneo "había terminado".

"Tengo diferentes emociones en estos momentos. Justo después de ganar no podía entender lo que estaba pasando, no podía creer que el torneo había terminado. Sigo disfrutando", aseguró antes de volverse a emocionar con el hecho de ser la próxima número uno del ranking WTA. "Es un sueño hecho realidad. He estado soñando y trabajando muy duro para ganar el Grand Slam y ser la número uno", añadió.

Azarenka manifestó su confianza en poder seguir a este nivel el resto de temporada. "Tengo que seguir adelante de la misma manera, con mi mentalidad, que es ir partido a partido. Va a ser un año largo; va a haber un montón de partidos. Sólo quiero seguir mejorando. Siento como que no hay límite, que si quiero puedo dar lo mejor de mí cada día", afirmó.

La bielorrusa comentó entre risas los nervios con los que afrontaba el partido. "Estaba súper nerviosa. No veía el momento de poder ir a la cancha y jugar. Fue una larga espera. Pensaba ''bien, estoy lista para ir. ¿Cuándo llegará? ¿Qué hora es?''. Creo que manejé bien la situación después de estar muy floja al principio. Ella comenzó agresiva; intenté mantenerme en guardia, pero no funcionó, no llegué a unos cuantos golpes", dijo la nueva campeona.

"Sólo he conseguido el final perfecto. No pensé en tener que jugar perfecto; tenía que jugar mejor que mi oponente. Los dos primeros juegos fueron un poco desastre, pero luego tomé impulso. Me relajé y me centré en cada punto", concluyó.