El número dos del mundo en el ranking ATP, Andy Murray, ha declarado, tras romper el pasado domingo con la racha de 77 años sin que un tenista británico se proclamara campeón de Wimbledon, que ya no tendrá que jugar con "presión", por lo que a partir de ahora podrá "disfrutar" de su tenis.

"Ahora es difícil poder procesar todo. Pensar en la cantidad de gente que estaba viendo la final, en los años que han tenido que pasar. Ya no tendré que jugar con esa presión. Ahora podré disfrutar de mi tenis y tratar de ganar más Grand Slams", explica en una entrevista concedida a Head Radical.

Asimismo, el escocés reconoce que dicho triunfo se corresponde al que "probablemente" haya sido "el día más grande" de toda su carrera. "La final fue increíble, muy duro tanto física como mentalmente. Tuvo puntos muy bonitos, de rotura, ''match points''... Hubo de todo", expresa.

Por último, Murray indica que la siguiente parada importante será el US Open, el cual se disputará a partir del próximo 26 de agosto y hasta el 9 de septiembre. "El año pasado conseguí allí uno de los mayores triunfos de mi carrera, y tengo muchas ganas de volver a Nueva York", concluye.