C. FEDERACIÓN | RUMANIA 1 - ESPAÑA 2
Muguruza tumba a Halep
La española ganó a la número tres del mundo por 6-4 y 6-3 en el tercer partido. Garbiñe debuta en Copa Federación y lidera a España en Rumanía.
Hay jugadoras y jugadores con carácter. Poderosos de mente. Capaces de echarse un equipo a la espalda y no doblarse por el peso. Son ese tipo de tenistas a los que la Copa Davis o la Copa Federación no les aplasta con la presión. Es el caso de Garbiñe Muguruza, que con 21 años y debutando en la competición por países consiguió ganar el sábado a Irina Camelia Begu y hoy a la número tres del mundo, Simona Halep, por 6-4 y 6-3 en 1h:33. En Galati, Rumanía, ante los ojos de Ilie Nastase, de Ion Tiriac y de más de 4.000 espectadores. España domina 2-1 la primera eliminatoria por el ascenso en el Grupo Mundial II. Tiene dos balas: la de Silvia Soler y la del dobles que jugarían Muguruza y Anabel Medina para incendiar Galati. Para dar la campanada.
“He jugado muy bien y es una de mis grandes victorias hasta el momento”, resumió Garbiñe, 24 de la WTA, después de darse un tremendo abrazo con la capitana, Conchita Martínez. Se hacía el silencio en el Danube Arena después de ver una exhibición de lo que es y lo que puede llegar a ser de la jugadora que se decidió en octubre a jugar por España y no por Venezuela, de donde es su madre, tras tres años de cuitas. Comenzó desatada, con dos breaks. Y en 37 minutos había finiquitado el primer set pese a una rotura de Halep, la chica que pretende discutir la hegemonía a Serena y Sharapova, en el octavo juego. Drives paralelos y restos como aspas de molino (un 52% acreditó Garbiñe al resto al final) ponían el 6-4.
En la segunda manga, los nervios también jugaban. Halep se agarró a la pista. Tras un primer break de la española, la rumana igualó. Y llegó el momento decisivo. Un séptimo juego que se extendió a lo largo de casi trece minutos. Jugado al límite. Sólo apto para corazones duros y mentes fuertes. Para gente decidida. Y Garbiñe consiguió el break. Y se disparó hacia la victoria que amarró con otra rotura final (6-4). Su séptimo triunfo ante una jugadora top-10. Ella vino aquí a ganar. A contagiar alegría y determinación. A recrearse en el riesgo. Pase lo que pase, España tiene líder.