Andre Agassi vive apartado del tenis, un deporte que, según ha confesado en su autobiografía, llegó a aborrecer pero que le ha proporcionado un estatus económico y social que le permite ocuparse a menudo de causas solidarias. El jueves por la noche donó un millón de dólares a la Cleveland Clinic Ruvo Center para la salud cerebral.

Agassi extendió ese cuantioso cheque junto a su esposa, la también extenista y exnúmero uno mundial Steffi Graf, durante la 21ª Gala Anual Power of Love en Las Vegas. Allí recibió el Community Leadership Award (Premio Liderazgo Comunitario) del evento por fundar una escuela preparatoria que lleva su nombre. 

Durante su discurso, Agassi dio las gracias por su ayuda al director de la clínica a la que ha destinado el dinero, Larry Ruvo: "Habéis estado ahí conmigo en cada paso todo el camino, a veces cerca de mí y otras veces detrás".