¿Qué razones pueden hacer entender esta derrota?

Jugué muy corto, sin agresividad y sin calma. He luchado mucho, pero en ningún momento tuve calma, he perdido por esa falta de calma y por no jugar bien. No hay excusas. El partido empezó muy mal para mí. El segundo set ya debí ganarlo 6-4 cuando tuve saque a favor, y cuando perdí ese saque era ya un síntoma de que no tenía calma.

¿Le dejará este día secuelas para el futuro próximo?

Perder aquí no es ninguna tragedia. Tenía que ocurrir cualquier día. Es un pinchazo que hay que asumir. Ahora, mi preparación es para la piscina de mi casa. En tres días más empezaré a pensar en Wimbledon. No es mi mejor día, no me siento bien. Las derrotas no engrandecen, pero uno se da cuenta de la dificultad que tenía lo hecho hasta ahora. Ganar aquí era un objetivo más, pero al fin esto es sólo un partido más.

¿Cómo se ha sentido al final del partido?

No siento nada, estoy acostumbrado a oír que este público coree los nombres de los rivales con los que juego. Es una pena que este público en ningún momento haya tenido un detalle conmigo. Ojalá un año lo tengan.

Una vez eliminado el campeón, ¿a quién ve favorito?

Todos los que están en cuartos tienen sus opciones, pero para Federer sería bueno completar su Grand Slam. Roger lleva cuatro años insistiendo, y ha perdido cuatro finales y una semifinal.