España tiene claras opciones de estar otra vez en la final de la Copa Davis tras derrotar a Alemania (3-2) en Marbella y caer Rusia en Israel (4-1). Los israelíes van a rendir visita al campeón del 18 al 20 de septiembre. "Nunca diré que tenemos un pie en la final, porque si están en semifinales es por algo y no hay que subestimarles", advirtió Verdasco. "Hay que ser cautos", le secundó el seleccionador, Albert Costa. Declaraciones hechas todas con una sonrisa en la boca y pensando en que se ha evitado un complicado viaje a Rusia.

Israel es la cenicienta, pero también la sorpresa, del Grupo Mundial. Nunca había alcanzado esta ronda y lo hizo después de ascender frente a Perú, ganar en Suecia en primera ronda (2-3) y destrozar a Rusia en un enfervorizado Nokia Arena de Tel Aviv (cancha del Maccabi) que se tomó los cuartos de final como una cuestión nacional.

"Tengo dos F-16". Así calificó el capitán, Eyan Ran, a Dudi Sela y Harel Levy, los hombres que ganaron los dos primeros individuales. Sela, que pasó por España entre 2002 y 2003, tiene 24 años y es 33º del mundo. Llegó a batir a Fernando González en la Davis 2008 en Chile y este año eliminó a Robredo en Wimbledon.

El veterano Levy (30 años) es el 210º del mundo y, tras pasar por el quirófano para arreglarse un hombro en 2006, ahora prácticamente sólo juega torneos challenger, el segundo escalón del circuito. El dobles preocupa más, porque Andy Ram (11º en dobles) y Jonathan Erlich (92º) ganaron juntos el Abierto de Australia en 2008 y en Davis tienen un balance de 11-3.

Para acoger la eliminatoria aún no hay plazo abierto ni plica, pero suenan Oviedo o Gijón, Tarragona, Córdoba o incluso Marbella de nuevo. La seguridad primará, ya que el Suecia-Israel se decidió disputar a puerta cerrada porque, en plena campaña de ataques sobre Gaza, numerosos manifestantes suecos intentaron detener los partidos de primera ronda.