Feliciano tumba a Roddick y Ferrer vence a Harrison

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Feliciano tumba a Roddick y Ferrer vence a Harrison

Feliciano tumba a Roddick y Ferrer vence a Harrison

El toledano derrotó al estadounidense Andy Roddick, por 7-6 (2), 7-6 (2) y 6-4. Por su parte, Ferrer pudo con el también estadounidense Ryan Harrison por 6-7(6), 6-1, 4-6, 6-3 y 6-2.

Feliciano López, número 44 del mundo, se impuso hoy en tres sets al octavo favorito en el torneo de Wimbledon, el estadounidense Andy Roddick, por 7-6 (2), 7-6 (2) y 6-4 para colocarse en octavos de final, una ronda que no alcanzaba en el All England Club desde 2008. Feliciano López llegó a su cita con la Central como cuarto mejor sacador del campeonato -con 44 "aces" anotados en sus dos partidos anteriores- y superó al que situaba como el segundo jugador con mejor servicio -con 45 saques directos-.

López, que ganó tras dos horas y veinte minutos de intenso duelo, se enfrentará en octavos al ganador del encuentro entre el francésGael Monfils, noveno favorito, y el polaco Lukasz Kubot.

El séptimo favorito en el torneo de Wimbledon, el español David Ferrer, derrotó hoy, tras flojear en momentos decisivos, al estadounidense Ryan Harrison por 6-7(6), 6-1, 4-6, 6-3 y 6-2 y se colocó por cuarto año consecutivo en la tercera ronda del Grand Slam.

David Ferrer se deshace de Harrison sin ahorrarse sufrir

Ferrer, que se desgastó en esta cita durante tres horas y media repartidas en dos jornadas, afrontará su próximo examen en el All England Club de Londres ante el eslovaco Karol Beck, que retiró de la competición al albaceteño Guillermo García-López, vigésimo sexto cabeza de serie.

El partido entre Ferrer y Harrison comenzó en el último turno de ayer, jueves, pero el árbitro decidió aplazarlo para hoy por la falta de visibilidad cuando los dos contrincantes se debatían en el cuarto set. En el instante en que se detuvo el juego, el español perdía en el marcador por dos sets a uno y llevaba cuatro juegos ganados, frente a los dos de su adversario, en la cuarta manga. Además, la cita había sido interrumpida provisionalmente en dos ocasiones a causa de la lluvia, lo cual ayudó sobremanera al americano, que no podía esconder su agotamiento.

"Hoy pude relajarme, fui más consistente y regular, y quizá él no sirvió como ayer", dijo Ferrer ante las cámaras de televisión del torneo al término de su partido para explicar la gran diferencia entre su juego de ayer y el de hoy.

Fue casi un milagro que el estadounidense se anotara el primer set. Ferrer había marcado la pauta desde el comienzo. Rompió el primer servicio de su rival, diez años menor que él (19), y se acomodó en la pista, con acertadas subidas a la red.

La reacción de Harrison

Sin embargo, el joven adversario le devolvió la ruptura del saque y lo igualó en número de juegos, forzando así el "tie-break". Incluso en ese desempate a vida o muerte, el español empezó siendo dominante y llegó a disfrutar de una bola de set. Su error fue dejarla escapar (cuando iba arriba con 6-4).

Harrison se recompuso de esa adversidad y anotó cuatro puntos más, de manera consecutiva, para embolsarse el set, que lo finiquitó con un "ace" (o saque directo) que voló a una velocidad de 206 kilómetros por hora. La experiencia ayudó a Ferrer a contemplar con perspectiva sus mejores opciones y desplegar sus armas. En el segundo set centró la cabeza y firmó con facilidad un 6-1.

Los vaivenes

Una de cal y otra de arena. Así funcionaron estos jugadores en la pista. Bajadas y subidas. Recaídas y, a la vez, gran temple. Resultaba difícil apostar por un vencedor a ojos cerrados, pero finalmente, tras la noche de descanso, primó la veteranía. Si bien a Harrison le había venido de perlas el alto al fuego de anoche, por falta de luz, para recuperar sus piernas; también Ferrer sacó provecho de esa oportunidad para recomponer su cabeza.

El alicantino elogió hoy al joven tenista, que en su opinión, "será uno de los grandes". "(Harrison) es el futuro, es un gran jugador. Me gusta mucho y fue una sorpresa para mí ayer", confesó David Ferrer.

El más veterano de los dos, de 29 años, se supo imponer esta tarde, pese a no encontrarse en su superficie favorita. Su superioridad sí fue indiscutible hoy, en parte quizá, como afirmó el español, porque "Harrison no jugó tan bien hoy y no hizo tan buen servicio". Todo ello le valió para forzar rápidamente el quinto set y anotárselo por 6-2.