El uso de la nueva técnica de inyecciones con factores de crecimiento que desarrollaron los doctores Mikel Sánchez y Eduardo Anitua para regenerar articulaciones dañadas se ha extendido más allá de las rodillas y más allá de jugadores como Rafael Nadal. Estrellas deportivas mundiales como Kobe Bryant y Usain Bolt han utilizado los factores de crecimiento para mitigar sus problemas en rodillas y tendones. Nicolás Almagro, que acabó en Londres el torneo de los Juegos Olímpicos con una fuerte tendinitis en el hombro derecho, realizó un intenso tratamiento con los factores (a base de plasma) para combatir esa tendinitis durante el pequeño intervalo que hubo entre los Juegos y la temporada estadounidense en pista dura. "El tratamiento me lo hizo mi médico personal, Paco Martínez", confirma el mismo Almagro. Tras las inyecciones con plasma, Almagro jugó un buen US Open y alcanzó los octavos de final, donde cayó ante Tomas Berdych.
"Ahora me encuentro bien y aunque aún noto alguna molestia, el dolor fuerte se ha ido", precisa Almagro, que adorna sus zapatillas con tres nombres femeninos: Cris (Cristina García, su novia), Elena (ahijada) y Martina (sobrina). Anteayer, Almagro se quedó dormido en una camilla del vestuario español, cuando pasaba por las manos de los médicos. Curiosamente, el tenista murciano, entrenado por el técnico Samuel López, llama Tete a David Ferrer y Zipi y Zape a los doblistas españoles de esta eliminatoria, Marcel Granollers y Marc López. Pero, respetuosamente, Almagro usa el nombre de pila de Àlex Corretja cada vez que se refiere al capitán. Le llama Alejandro.
