Toni Nadal, tío y entrenador de Rafa, considera que ser el número uno del tenis mundial no va a suponer más presión para su sobrino: "No creo que cambie su actitud. Él se siente el mismo jugador de siempre y sabe que los números dependen del momento. Ahora está el número uno y quizá dentro de cinco meses esté en el número cinco".

Toni justifica la gran temporada de Nadal en el 2008 en que "Rafa tuvo una notable mejora en su servicio, en su revés, en su posición en la pista y en la mayor agresividad de su juego". "El momento más determinante fue vencer en Wimbledon; fue ahí donde vio la posibilidad de ser número uno del mundo. A Rafa le habían encasillado mucho como jugador de tierra y ganar allí fue muy importante".

Sobre Federer tiene palabras de elogio: "Creo que ha demostrado que si no es el mejor tenista de la historia está a punto de conseguirlo. Pero sabe que para acabar de serlo ha de ganar Roland Garros".