Verdasco pierde y España está contra las cuerdas

COPA DAVIS | FRANCIA - ESPAÑA

Verdasco pierde y España está contra las cuerdas

Verdasco pierde y España está contra las cuerdas

AFP

España pierde 2-0 en los cuartos de final de Copa Davis contra Francia, en la rapidísima pista de la Sala Zenith de Clermont-Ferrand, tras la derrotas de Verdasco ante Llodra por 6-7, 6-4, 6-3 y 7-6; y de Ferrer ante Monfils por 7-6, 6-2, 4-6, 5-7 y 6-4.

El campeón, contra las cuerdas. España pierde 0-2 en los cuartos de final de Copa Davis contra Francia, en la rapidísima pista de la Sala Zenith de Clermont-Ferrand, y nunca, desde la creación del Grupo Mundial en 1981, los españoles han conseguido remontar ese resultado en contra. Otros países lo han logrado hasta en ocho ocasiones. Pero España no. Mañana, el dobles que enfrentará a Fernando Verdasco y Feliciano López contra Michael Llodra y Julien Benneteau podría ser definitivo. Y fatal.

Tras la remontada épica de dos sets de David Ferrer ante Gael Monfils, que murió en la orilla del quinto por un resultado final de 7-6 (7/3), 6-2, 4-6, 5-7 y 6-4, Fernando Verdasco cayó también con Michael Llodra por 6-7 (5/7), 6-4, 6-3 Y 7-6 (7/2) tras tres horas y 25 minutos.

El número uno español (10º del ránking, 26 años) sucumbió al juego sin ritmo de Llodra (30 años, 35º), que sustituía al lesionado Tsonga. El parisino, que este año ganó el torneo de Marsella sobre una superficie similar, dominó las claves de la pista: saque y volea en la red, búsqueda de las líneas, no al peloteo. Verdasco no se encontró nunca cómodo en el resto. Aún así, en la primera manga salvó dos bolas de set y acabó adjudicándose el tie-break.

Luego vendrían andanadas más certeras del Llodra. Y de la jueza de silla, la británica Alison Lang, que se tragó algún punto clave para el número uno español en ese tie-break, en la segunda manga y en la tercera, en la que Verdasco se desesperó. "¿Estás loca?", se le oyó. Con 6-4, 6-3 y 7-6 (7/2) a España se le comienza a escapar la tercera Ensaladera seguida de las manos. Todo está en manos del dobles.

Ferrer murió en la orilla

España sufrió un revés doloroso a las primeras de cambio. David Ferrer no pudo superar a Gael Monfils por 7-6 (7/3), 6-2, 4-6, 5-7 y 6-4 tras casi cuatro horas de partido en la rapidísima pista de la Sala Zenith de Clermont-Ferrand, donde la selección campeona disputa los cuartos de final y defiende tres años y tres meses de imbatibilidad. Ferrer remontó dos sets al elástico jugador de París, pero en el quinto no pudo cerrar.

El de Jávea comenzó en tres juegos con la 'versión Masters Shanghai 2007'. Es decir, enchufado, potente al saque y con una derecha plana que corría. Así se colocó 3-0 rompiendo el servicio del galo. Pero esa versión duró hasta que el indolente Monfils (17º del mundo) despertó, cubrió más pista y comenzó a ganar los puntos largos y a arriesgar más buscando los winners (101 por 65 al final del partido y también 21 aces por 4 de Ferrer). En las dos propuestas estuvo más fino que el español (12º ránking ATP). El tie-break lo gestionó mejor para ganarlo por 7-3.

En el segundo set, las tendencias se acentuaron ante una hinchada respetuosa pero animosa, que ocupó tres cuartos de los 6.100 asientos. Ferrer llegó a estrellar la raqueta en el suelo con 4-1 abajo. Pero no se desanimó a pesar del 6-2. Tiró de orgullo y de la experiencia de sus 17 partidos en Davis (ocho victorias seguidas encadenaba) y se lanzó a morder al francés, al que se le vio cansado. Rotura en tercer juego y, minando al elástico rapero, autopista al 6-4.

Era cuestión de marear al pez, que ya estaba boqueando. "¡Qué orgullo ser tu compañero!", iba escribiendo Feli en su Twitter. Mientras el público hacía la ola y Monfils, a la desesperada, intentaba animarlos y animarse, Ferrer llegó al 5-5 del cuarto set y rompió para 6-5 mientras el larguirucho parisino (1,93) se vaciaba botellas de agua sobre la cabeza, roto. 7-5 y llegaba la hora de rematar.

Pero el remate no llegó. Monfils rompió para 2-0, el público y el jugador se envalentonaron, Ferrer se enfurruñó y recibió un warning y el set acabó 6-4, aunque el español nunca lo diera por perdido porque con 5-2 tuvo bola de break y rompió para 5-4 aunque no lo consolidara en el siguiente. Ferrer fue todo pundonor y lucha. Irrepochable.